Es una mole gigantesca de 17 metros y 160 toneladas que simboliza al soldado que combatió en las islas. Las motivaciones de su autor en una jornada en que la ciudad neuquina estuvo colmada de veteranos.
El soldado es un verdadero gigante que sorprende al visitante que entra a Zapala por la ruta 14 y acceso Fortabat, a unos diez minutos del centro de “la ciudad del viento”, como así se la conoce a esta localidad de Neuquén. Con orgullo los promotores de esta iniciativa insisten en remarcar que es el monumento al soldado de Malvinas más grande de Argentina. Hoy por la mañana lo inauguraron en un acto en el que se dieron cita veteranos de todo el país y que el municipio recibió con el cálido lema de “Todos somos anfitriones”.
Zapala, situada en el centro de la provincia de Neuquén, fue fundada durante la Campaña al Desierto de fines del siglo XIX. Primero fue un campamento y un caserío. Se toma como fecha de origen de la ciudad el loteo el 12 de julio de 1913. Al año siguiente llega el tren y la localidad empieza a crecer. como muchas otras localidades de la Patagonia con el paso del ferrocarril.
Homenaje a los soldados
Día soleado de unos 11 grados, de pronto algunas nubes y con el habitual viento, el acto se realizó al pie del monumento, que es una vieja iniciativa que maduró con el tiempo. Fue enclavado en uno de los puntos más alto de la ciudad, donde los cerros Palau Mahuida, ya nevado, el Cancino y un poco más atrás El Atravesado, brindan un imponente panorama de la belleza patagónica.
La obra en cuestión tiene una altura de 17 metros, pedestal incluido. Refleja a un soldado argentino, con una rodilla al pie que sostiene sobre su mano derecha una bandera argentina.
Tiene un peso, con su base, de 160 toneladas; solo la cabeza con el casco se llevan unas 20 toneladas del total. La escultura está incrustada en un suelo de basalto, un mineral muy resistente.
El autor
Aldo Beroisa, el responsable del diseño de la obra, estaba exultante durante el acto. El artista le explicó a Infobae que el rostro del soldado lo pensó neutro para que en él se vieran reflejados cada uno de los veteranos, no solo los hombres sino también las mujeres que participaron del conflicto del Atlántico Sur. La rodilla en tierra representa el respeto a la causa Malvinas y a los caídos y la bandera, cuyos vivos colores celeste y blanco contrastan con el gris del hormigón. El soldado sostiene la enseña “con reverencia y firmeza” en su mano derecha y lo pensó como símbolo de unidad nacional, de libertad y de los valores fundamentales de nuestro país.
La obra comenzó en 2022. Beroisa confesó que hacía mucho tiempo que había hecho el diseño y que cuando la municipalidad de Zapala lo contactó, le encargó una obra de unos cuatro metros. El insistió que debía ser más grande por lo que representaría, y los doce metros proyectados pronto terminaron en 17, “porque el soldado que combatió en Malvinas es realmente grande”, aseguró.
El artista, de 59 años, fue educado por su estricto padre ferroviario, quien le enseñó a leer antes de que entrara a primer grado. Desde niño descubrió su vocación que volcaba en la construcción de los propios juguetes, porque en la familia no había dinero suficiente para comprarlos. Asesorado por reconocidos paleontólogos, también diseñó animales prehistóricos. Su imaginación se disparó a los 8 años, cuando por primera vez vio los restos de un plesiosaurio.
El escultor -que destacó que vive en la “República de Cutral Có”- fue quien supervisó la construcción de la obra que tiene una estructura de acero petrolero, con caños de más de una tonelada de peso. Está armada con material desplegable recubierto de hormigón. Destacó la colaboración de Martín Chávez, quien hace quince años que lo acompaña, y que se ocupó de las piezas que forman el soldado. Además otros cinco compañeros intervinieron en su construcción.
Beroisa la construyó por tramos en su taller y luego fue transportada en camiones, y por un complejo sistema, fue ensamblada allí en Zapala. Se lamentó que la obra no tuviese más detalles, pero que tanto la altura como los fuertes vientos le impidieron agregar. “Lo pensé como prenda de unión de los argentinos, en homenaje a los que lucharon en las islas”.
Malvinas nos une
Hace muchos días que en Zapala se palpitaba este acontecimiento. Era habitual el desfile de los vecinos que se acercaban para ver los avances de la obra y el municipio, como preveía un aluvión de visitantes, autorizó a los comercios a mantener sus puertas abiertas hoy domingo.
El acto se desarrolló al pie de la escultura. Estuvo encabezado por el gobernador de Neuquén Rolando Figueroa y el intendente local Carlos Koopmann Irizar. Figueroa dijo que el monumento fue moldeado por las manos de todos los neuquinos y que está ubicado en el corazón de la provincia. Pidió no olvidar a “nuestros héroes”, que combatieron “con gloria, honor y entrega”. Por su parte, el intendente aseguró que el monumento será un faro y homenaje para los veteranos, y destacó que “Malvinas nos une”.
Al comienzo un grupo de veteranos ingresó con la imagen de la Virgen de Luján, que fue depositada en una ermita al pie del monumento. También se habilitó lo que se llamó “Muro de los héroes”, un espacio para la exhibición de placas recordatorias.
Hubo entrega de placas recordatorias y el cierre fue con un desfile cívico militar, con la participación de centros de veteranos y de escuelas locales.
El escultor dijo que hay otros proyectos en mente, como el de realizar una obra en la ciudad de Buenos Aires que represente a la madre de Malvinas, que sufrió en silencio, que dio a la Patria su bien más preciado y que fue un firme sostén en los difíciles años de la posguerra. Pero aclaró que eso es tema para otra oportunidad, que ahora quería disfrutar de este día, en el que estaba rodeado de héroes, mientras observaba su obra, a ese soldado sin rostro pero que tiene la cara de todos.
Legislatura Rio Negro
Creado por Julio Torreguitart