Una explosión y un tiroteo tuvieron lugar este viernes en la sala de conciertos Crocus City Hall, en Krasnogorsk, a las afueras de la capital de Rusia, Moscú, que, según el balance provisorio, dejaron al menos 40 muertos y más de 100 heridos. Entre ellos, unos 20 fueron hospitalizados, cinco en estado grave.
Videos compartidos en redes sociales muestran a la gente que estaba disfrutando de un show del grupo Piknik huyendo del salón, así como una densa nube de humo negro saliendo del sitio y se reportó también el colapso del techo del sitio. Inclusive, la agencia TASS dijo que un tercio del edificio está en llamas.
Imágenes difundidas muestran tres personas vestidas con ropa de camuflaje, irrumpiendo en el lugar y abriendo fuego indiscriminadamente en el interior de la sala usando fusiles automáticos. Otros videos muestran los cuerpos yaciendo en el suelo entre manchas de sangre. No obstante, servicios de emergencia no pudieron determinar aún si hubo más atacantes, por lo que se consideran hasta cinco tiradores. El medio RT mencionó que “hay reportes de que varios atacantes se han atrincherado dentro de Crocus City Hall” y las fuerzas de seguridad indicaron que siguen buscando a los perpetradores.
De momento, se está llevando a cabo la evacuación y la evaluación del edificio. Al menos unas 100 salieron por el subsuelo del lugar mientras otro tanto, que llegaron hasta el techo, están siendo rescatadas con equipos especiales para dicha altura.
El gobernador Andréi Vorobiov llegó al lugar de los hechos poco después de que se conociera la noticia y ordenó la creación de una unidad de trabajo especial, que incluye a los efectivos del Escuadrón Especial de Respuesta Rápida de la Guardia Nacional y los antidisturbios, para controlar la situación. También trabajan bomberos, asistidos por dos helicópteros -uno de ellos un MI-26, de los más grandes del mundo-, y más de 70 ambulancias. En total, el Ministerio de Situaciones de Emergencia contabilizó 320 personas y 130 equipos dedicados a esta tarea.
El alcalde de la capital, Sergei Sobyanin, declaró que “ocurrió una terrible tragedia. Mi más sentido pésame a los seres queridos de las víctimas. Di órdenes de brindar toda la asistencia necesaria a todos los que sufrieron durante el incidente”, mientras la defensora del pueblo, Tatiana Moskalkova, lo calificó de “ataque terrorista”. Inclusive, el Ministerio de Asuntos Exteriores pidió a toda la comunidad internacional condenar este hecho: “¡Toda la comunidad internacional debe condenar este crimen odioso”.
La Dirección General de Investigación del Comité de la Federación Rusa en la materia ya abrió una causa penal en virtud del artículo 205, sobre actos terroristas.
Creado por Julio Torreguitart